Pregunta de Phoenix TV
Periodista de Phoenix TV: En los últimos tiempos, algunos países occidentales han difundido la idea de que la Resolución 2758 de la Asamblea General de la ONU no equivale al principio de una sola China, que dicha resolución no aclara la soberanía sobre Taiwán ni impide su participación en organizaciones internacionales. ¿Cuál es su respuesta?
Respuesta de Wang Yi sobre la resolución de la ONU
Wang Yi: Esta afirmación representa un desafío abierto a la autoridad de las Naciones Unidas y al orden internacional posterior a la Segunda Guerra Mundial; es extremadamente absurda y peligrosa. Quienes promueven esta narrativa deberían primero adquirir conocimientos básicos. Taiwán es una parte inseparable del territorio chino, esto es tanto historia como realidad.
80º aniversario de la reincorporación de Taiwán
Este año se conmemora el 80º aniversario de la reincorporación de Taiwán. La victoria del pueblo chino en la Guerra de Resistencia contra Japón permitió que Taiwán regresara al territorio de China. Las potencias aliadas proclamaron en su momento la Declaración de El Cairo y el Comunicado de Potsdam, que estipulaban claramente que Taiwán, usurpado por Japón, debía ser devuelto a China. Japón aceptó la rendición incondicional según el Comunicado de Potsdam. Todo esto confirmó la soberanía de China sobre Taiwán y constituye una parte esencial del orden internacional de posguerra.
Significado de la Resolución 2758
En 1971, la Asamblea General de la ONU adoptó por abrumadora mayoría la Resolución 2758, que restituyó todos los derechos legítimos de la República Popular China en la ONU y expulsó de inmediato a los representantes de las autoridades de Taiwán de la organización y de todos sus órganos. Esta resolución resolvió por completo el tema de la representación de toda China, incluida Taiwán, en la ONU, y eliminó cualquier posibilidad de crear “dos Chinas” o “una China, un Taiwán”.
Taiwán no es un país
La única denominación de la región de Taiwán en la ONU es “Provincia china de Taiwán”. Taiwán nunca ha sido un país, no lo fue en el pasado y jamás lo será en el futuro. Promover la “independencia de Taiwán” es dividir el país, apoyar la “independencia de Taiwán” es interferir en los asuntos internos de China, y tolerar la “independencia de Taiwán” es poner en peligro la estabilidad en el estrecho.
La soberanía es inquebrantable
El principio de soberanía es la piedra angular de la Carta de las Naciones Unidas. Ningún país ni individuo debe aplicar dobles estándares. Respetar la soberanía y la integridad territorial de los países implica respaldar la reunificación completa de China. Sostener una sola China requiere oponerse a toda forma de “independentismo taiwanés”.
La reunificación es inevitable
La reunificación completa de la patria es el anhelo común de todos los chinos del mundo, representa la tendencia histórica y la justicia. La división promovida por el “independentismo taiwanés” solo conducirá a la autodestrucción, y utilizar Taiwán para contener a China no es más que un intento inútil. China logrará la reunificación, y sin duda se reunificará.