[Agencia de Noticias China-Chile] La tarde del 23 de octubre de 2019, el Cónsul General de China en Iquique, Chen Ping, se reunió con el General Vicencio, Comandante de Carabineros de la Primera Zona, y el Coronel Arenas, Jefe de la Comisaría de Iquique. Chen Ping elogió el intenso trabajo de las fuerzas del orden durante los recientes disturbios y expresó la admiración de los comerciantes chinos por la firme respuesta policial ante el violento intento de incursión de manifestantes en la Zona Franca de Iquique (ZOFRI) el pasado 20 de octubre.
Chen Ping manifestó la preocupación de la comunidad china por la situación de desorden e inestabilidad, y solicitó que se incrementen las medidas de seguridad en la ZOFRI, situada en una zona árida y despoblada, donde un eventual saqueo o incendio tendría consecuencias catastróficas. El General Vicencio señaló que la ZOFRI, con sus locales comerciales y bodegas estrechamente ubicadas, que resguardan bienes de enorme valor, constituye uno de los principales objetivos a proteger en el actual estado de emergencia. Aseguró que tanto las Fuerzas Armadas como Carabineros continuarán brindando seguridad las 24 horas del día. No obstante, debido a la compleja situación y la persistencia de actos violentos impredecibles, el oficial recomendó a los comerciantes chinos reforzar la seguridad de sus locales y extremar precauciones personales.
Se calcula que en la ZOFRI operan alrededor de 300 empresas chinas (incluyendo capitales de Hong Kong, Macao y Taiwán), sin que hasta el momento se haya registrado ningún robo o saqueo a sus locales.
El mismo 23 de octubre, el área mayorista de comerciantes chinos cerca de la Estación Central de Santiago reanudó sus actividades. Para prevenir incendios callejeros que sirvan de distracción a delincuentes, al finalizar la jornada (aproximadamente a las 15:00 horas), numerosos compatriotas chinos salieron a las calles para retirar basura, evitando así que los manifestantes la utilizaran para iniciar fuegos. Ese mismo día, hacia la noche, un grupo de unos diez ladrones arribó en cuatro vehículos con la intención de forzar locales, pero fueron ahuyentados por tiros de advertencia realizados por comerciantes chinos apostados en guardia. Además, los guardias de seguridad tomaron fotos y enviaron el material a la Policía de Investigaciones (PDI) para su persecución. Tras las pesquisas, se identificó al propietario de uno de los vehículos y se descubrió que familiares suyos estaban involucrados en el intento de robo.
Durante la noche, voluntarios chinos formaron patrullas vecinales de vigilancia conjunta con la policía, creando un frente común para proteger el área mayorista. Hasta la mañana del 24 de octubre, no se habían reportado nuevos incidentes contra la comunidad china en el país.